Un Tribunal Federal ordena su liberación por cuarta vez
Uriel Carmona, fiscal general del estado de Morelos, podrá salir del penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México, donde se encuentra recluido desde el 19 de septiembre.
Así lo determinó un Tribunal Federal, que concedió la suspensión provisional al ex funcionario, acusado de tortura en agravio de Luis Alberto Ibarra Ramírez, alias El Diablo.
Esta es la cuarta ocasión que un colegiado demanda la liberación de Uriel Carmona, quien ha impugnado la prisión preventiva que se le impuso por el delito de tortura.
El fiscal general del estado ha argumentado que goza de fuero constitucional y que la autoridad judicial que lo procesó es incompetente.
El Tercer Tribunal Colegiado en Materias Penal y Administrativa con residencia en el Estado de Morelos declaró fundado el recurso de queja presentado por el quejoso y ordenó su inmediata libertad.
La resolución fue emitida por unanimidad por los magistrados Juan Pablo Bonifaz Escobar, Nicolás Nazar Sevilla y Yolanda Velázquez Rebollo.
La medida cautelar otorgada por el Tribunal Federal contradice la decisión de Martha Eugenia Magaña López, jueza Quinto de Distrito en el estado de Morelos, quien negó la suspensión provisional a Uriel Carmona.
La juzgadora reconoció que el fiscal general del estado tiene protección derivada del fuero, pero consideró que ese tema debía resolverse en el sumario de origen.
El fiscal general del estado Uriel Carmona enfrenta una acusación por tortura
El caso de Uriel Carmona ha generado polémica y controversia en el ámbito jurídico y político.
Por un lado, se le acusa de violar los derechos humanos de una persona detenida por su presunta participación en el secuestro y asesinato del hijo del ex rector de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), Alejandro Vera Jiménez.
Por otro lado, se le defiende como un funcionario que ha combatido la corrupción y la impunidad en el estado.
La libertad provisional concedida por el Tribunal Federal no implica el fin del proceso penal contra Uriel Carmona, quien tendrá que seguir enfrentando la acusación por tortura.
Sin embargo, representa un alivio para el fiscal general del estado, quien podrá continuar con sus funciones desde fuera de la cárcel.