Inflación baja al 6.24% en abril: ¿qué significa?

Baja en la inflación es un respiro para la economía mexicana

La inflación es uno de los indicadores más importantes para medir el estado de la economía de un país.

Se refiere al aumento generalizado y sostenido de los precios de los bienes y servicios que consumen las personas.

Cuando la inflación es alta, el poder adquisitivo de la población se reduce y se genera incertidumbre e inestabilidad.

Por eso, la noticia de que la inflación en México bajó a 6.24% en la primera quincena de abril de 2023 es un respiro para la economía nacional.

Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), este es el nivel más bajo desde la primera quincena de octubre de 2021, cuando se ubicó en 6.05%.

Te puede interesar: Pegasus: El programa de espionaje más usado en México

¿Qué factores influyeron en esta baja?

La disminución de la inflación se debió principalmente a la caída de los precios de los energéticos y las tarifas autorizadas por el gobierno, que se redujeron 2.18% en la primera quincena de abril.

Dentro de este rubro, destacan la electricidad, que bajó 12.49%, y el transporte aéreo, que descendió 22.01%.

También contribuyeron a la baja algunos productos agropecuarios, como el chile serrano, el pepino y el jitomate, que registraron descensos superiores al 10%.

Por el contrario, los productos que más subieron fueron la naranja, el limón y el pollo, con incrementos mayores al 3%.

¿Qué implica esta baja en la inflación para el Banco de México?

A pesar de la baja, la inflación todavía se encuentra por encima del rango objetivo del Banco de México (Banxico), que es de 3% +/- un punto porcentual.

Esto significa que el banco central aún tiene el reto de controlar las presiones inflacionarias y mantener la estabilidad de precios.

Para lograrlo, el Banxico utiliza como principal instrumento la tasa de interés interbancaria, que es el costo del dinero en el mercado financiero.

Al subir o bajar esta tasa, el Banxico busca influir en las decisiones de ahorro e inversión de las personas y las empresas, y así afectar la demanda agregada y los precios.

Actualmente, la tasa de interés interbancaria se encuentra en 5%, después de que el Banxico la recortara en su última reunión de política monetaria el pasado 25 de marzo.

Sin embargo, algunos analistas consideran que el banco central podría pausar o revertir los recortes si la inflación no muestra signos claros de convergencia al objetivo.

¿Qué se espera para los próximos meses?

El panorama para la inflación en los próximos meses es incierto, debido a los efectos de la pandemia del COVID-19 y a otros factores externos e internos que pueden influir en los precios.

Entre ellos se encuentran:

  • La recuperación económica global y nacional, que puede aumentar la demanda y los costos de algunos bienes y servicios.
  • La volatilidad del tipo de cambio, que puede afectar el precio de los productos importados o con contenido importado.
  • Los choques climáticos o sanitarios, que pueden impactar la oferta y el precio de los productos agropecuarios.
  • Las expectativas inflacionarias, que pueden influir en las decisiones de consumo e inversión de los agentes económicos.

Por lo tanto, es importante estar atentos a la evolución de la inflación y a las medidas que tome el Banxico para mantenerla bajo control.

Así podremos tener una mejor idea del comportamiento futuro de los precios y del costo del dinero en nuestra economía.