En un giro sorprendente, Alejandra del Moral Vela, quien recientemente perdió la elección por la gubernatura del estado de México, ha renunciado a su militancia en el Partido Revolucionario Institucional (PRI). La ex priísta ha decidido sumarse al proyecto de Claudia Sheinbaum Pardo, actual jefa de gobierno de la Ciudad de México y figura prominente en el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
La política de Alejandra del Moral
Ambas políticas han aclarado que Del Moral no se unirá oficialmente a Morena, y Sheinbaum ha enfatizado que no le ofreció ningún cargo. La noticia de su salida del PRI, a tan solo ocho días de las elecciones, ha generado una serie de reacciones en el ámbito político.
El dirigente del PRI, Alejandro Moreno, minimizó la dimisión, mientras que el candidato presidencial de Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Máynez, señaló que los verdaderos esquiroles apuntan hacia otros lugares para ocultar lo evidente.
Diputados federales del PRI en el estado de México tacharon a Del Moral de traidora, mientras que senadores de Morena, PT y PVEM le dieron la bienvenida. El ex gobernador mexiquense Eruviel Ávila, ahora candidato plurinominal a diputado por el Verde, celebró la incorporación de Sheinbaum a su equipo.
La justificación
En una entrevista, Sheinbaum explicó que el acercamiento con Del Moral se dio a través de una persona conocida. Aunque no se unirá formalmente a ningún partido, su participación representa una suma de esfuerzos en favor de la transformación.
En una carta dirigida al líder del PRI, Alito Moreno, Del Moral atribuyó su renuncia al cambio de rumbo del partido. Aseguró que el PRI se ha alejado de sus ideales revolucionarios de democracia y justicia social, y lamentó la falta de diálogo y debate en la dirigencia actual.
El repudio no se hizo esperar. La diputada federal Laura Barrera calificó a Del Moral como una traidora, mientras que la candidata a la alcaldía de Toluca, Melissa Vargas, la acusó de abandonar a quienes la respaldaron.
La dirigente estatal del PRI, Ana Lilia Herrera, considera que la renuncia de Del Moral confirma que el estado de México fue entregado a Morena el año pasado. Por su parte, Alejandro Moreno insiste en que hubo un pacto de complicidad para entregar la gubernatura a cambio de impunidad para el ex gobernador Alfredo del Mazo.
En medio de esta agitación política, surge la pregunta: ¿quién será la ganadora en este barco que parece hundirse? Solo el tiempo dirá si la militancia priísta se cohesionará o si más figuras seguirán saltando.